Los carmelitas se establecieron en Bilbao en 1618 cuando fundaron un hospicio en el Casco Viejo, exactamente, en la actual calle Correo. Se denominaba hospicios a las residencias de un pequeño número de religiosos, sin llegar a ser comunidades formadas. Esta comunidad pervivió hasta su exclaustración durante los años 1820-1823. En 1880, los carmelitas volvieron a Bilbao, instalándose en Begoña-Santutxu, donde en 1887 se inauguró un convento de carmelitas y comenzaron su labor educativa.
Ya habían empezado las obras de desmantelamiento. Foto de Ángel Vadillo Recalde. Ca 1960


1930